Las 2 ramas principales de la Química son la química Orgánica y la Inorgánica. La diferencia entre un compuesto orgánico y uno inorgánico es que los compuestos orgánicos tienen Carbono en su estructura química, mientras que los compuestos inorgánicos no suelen tener este elemento.
La Química Orgánica estudia la estructura, propiedades, composición y reacciones de los compuestos que contienen carbono. Estas moléculas están relacionadas con sustancias producidas por organismos vivos, pero también incluyen sustancias creadas por el hombre como los plásticos. Algunos ejemplos son los ácidos nucleicos, las grasas, los azúcares, las proteínas, las enzimas y los combustibles de hidrocarburos.
La aplicación de compuestos orgánicos es enorme e incluye productos farmacéuticos, petroquímicos, alimentos, explosivos, pinturas y cosméticos. Los compuestos orgánicos son comunes en nuestra vida diaria, incluyen caucho, plástico (hoy en día casi todo se puede hacer de plástico, desde automóviles hasta prótesis), cosméticos, textiles y detergentes.
La química inorgánica estudia la síntesis y el comportamiento de compuestos inorgánicos, que no tienen enlace CH. Los compuestos inorgánicos incluyen sales, metales y sustancias formadas por un solo elemento. Los compuestos inorgánicos se encuentran en la naturaleza como minerales, pero también las sustancias creadas por el hombre son inorgánicas, como los fertilizantes.
Tiene aplicaciones en ciencia de materiales, pigmentos, tensioactivos, recubrimientos, medicamentos, combustibles y agricultura. Los compuestos inorgánicos se utilizan para crear cosas que usamos a diario. Por ejemplo, el amoníaco participa en la creación de plásticos, fibras y nailon, así como en la creación de adhesivos. Otro ejemplo es el cloro, que se utiliza en la fabricación de muebles, fertilizantes, productos farmacéuticos e insecticidas.
Los compuestos orgánicos tienen enlaces covalentes; pueden ser sólidos, líquidos o gases con puntos de fusión más bajos (menos de 360Cº). La mayoría de ellos son insolubles en agua pero solubles en disolventes orgánicos como dietil, éter y tolueno.
Casi todos ellos son inflamables y tienen reacciones lentas. Los compuestos inorgánicos, en cambio, tienen enlaces iónicos, la mayoría de ellos son sólidos con altos puntos de fusión. Muchos de ellos son solubles en agua pero insolubles en disolventes orgánicos. Pocos compuestos inorgánicos son inflamables y las reacciones suelen ser rápidas.
Los compuestos orgánicos e inorgánicos son opuestos, pero en muchas industrias trabajan juntos para crear productos diferentes.